Bachillerato Internacional: un currículum a la altura de los problemas globales

Ningún programa académico tiene la cercanía con los conflictos y la paz como la tiene el IB. El Bachillerato Internacional fue formulado entre varios pedagogos europeos después de la Segunda Guerra Mundial, con el propósito de ofrecer un programa educativo que traspasara las fronteras. Después de una guerra como aquella, estos pensadores encontraron la esperanza en la educación para “crear un mundo mejor y más pacífico a través del entendimiento intercultural y el respeto”.

            Al día de hoy, los estudiantes que se aventuran al IB, se enfrentan a un programa que les empuja a “aprender a aprender” de manera crítica para examinar su entorno local e internacional. De esta manera, el alumnado IB desarrolla una independencia intelectual indispensable para navegar este mundo cada vez más digital e incierto. Además, el programa está diseñado para estimular el sentido de servicio comunitario, así como la creatividad y un estilo de vida activa, con lo que se conoce como CAS. Es decir que, el Bachillerato Internacional no solo prepara a sus estudiantes para la excelencia académica, sino que les infunde el rigor necesario para resolver los problemas prácticos a los que se enfrentarán sin importar la profesión que elijan.

            Es esa independencia intelectual y el compromiso comunitario que el IB integra en todos sus programas, lo que prepara a sus alumnos para enfrentar los problemas globales actuales. No solo estamos hablando de una pandemia, sino de una crisis ambiental considerable, una oleada de desinformación, varias crisis humanitarias, enfrentamientos entre identidades y grupos diferentes, entre muchas cosas.

El Bachillerato Internacional está formando año con año, generaciones de jóvenes preparados para cuestionarlo todo y para diseñar soluciones rigurosas a problemas complejos, siempre teniendo en mente un futuro mejor para un mundo que es todos.