Ciclos y despedidas

Los ciclos son una buena manera de resignificar la vida. Aunque en muchas ocasiones el concluir una etapa parecería el fin de algo, en realidad es un nuevo comienzo: es la puerta hacia nuevos horizontes que, de tan largos, se expanden cuando aparecen delante.  

En el Colegio Internacional Terranova nos toca despedir a un sinnúmero de personas cada que concluye el año: maestros, directivos, alumnos. Cada uno de ellos termina una etapa, cierra una puerta y sale en una dirección muchas veces desconocida para nosotros. Sin embargo, en cada despedida hay también un eco de lo vivido, una huella que permanece. Porque lo que se construye en comunidad no desaparece: se transforma. Las risas compartidas, los aprendizajes, los desafíos superados juntos y hasta los silencios significativos, se quedan grabados en los pasillos, en las aulas y, sobre todo, en las personas.

Cada ciclo que termina en el Colegio Internacional Terranova es también un recordatorio de que estamos en constante movimiento. Y aunque despedirse duele, también es señal de crecimiento. Nos alegra saber que quienes se van llevan consigo no solo conocimientos, sino también memorias y valores que les acompañarán allá donde vayan. De igual manera, el eco de sus voces se quedan aquí, suspendidos entre los pasillos, como parte de la memoria del propio colegio. 

A quienes parten, les deseamos caminos llenos de propósitos. A quienes se quedan, les invitamos a seguir construyendo este espacio con entusiasmo y apertura. Porque en cada fin hay un inicio, y en cada despedida, la semilla de un reencuentro.

Gracias por ser parte de este ciclo.

Y nosotros…aquí seguimos, leyéndonos cada semana.